Como tantos otros argentinos, están en Europa y buscan volver al país. Pero esta vez la urgencia tiene un tinte heroico: quieren venir a aportar lo suyo cuando se necesitan cada vez más manos que curen. Son al menos 98 médicos, enfermeros y kinesiólogos, que este domingo por la tarde estarán en Buenos Aires gracias a su propio esfuerzo y el de una empresa y la Cancillería argentina.
La iniciativa arrancó en Barcelona, donde se autoconvocaron 58 profesionales a través de una página Web. La idea prendió también en otras ciudades españolas: Madrid, Bilbao, Cádiz. Y también fuera de España: dos se sumaron desde Holanda, seis desde Alemania, cinco de Inglaterra y dos de Suiza, uno de ellos con funciones en la Organización Mundial de la Salud (OMS). También hay médicos de Italia. La meta: llegar a Zúrich para tomar un vuelo de la empresa Edelweiss que negoció sin costo con el gobierno suizo y el embajador en Berna, Luis María Kreckler.Newsletters Clarín Coronavirus en la Argentina
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En realidad, el vuelo WK2090 estaba programado para venir a repatriar ciudadanos suizos que están en la Argentina y partirán este lunes desde Buenos Aires. Pero vendría casi vacío. Ya no: la mayoría de esos asientos serán aprovechados para traer de vuelta a estos profesionales de la salud argentinos, que hasta hace poco se encontraban atendiendo en establecimientos europeos, dando clases en universidades o completando posgrados.
Los médicos regresarán en un vuelo de la empresa Edelweiss.
Quedaba por resolver la conexión a Suiza para el grupo de profesionales más numeroso: el de Barcelona. La ayuda vino del lado privado: del empresario argentino Eduardo Eurnekian, dueño de Corporación América, un holding con su propia división aeroportuaria. Él pagó el vuelo chárter que los llevó hasta Zúrich, para desde allí tomarse el vuelo a Buenos Aires. El propio ministro de Relaciones Exteriores Felipe Solá, que supervisó las acciones de Cancillería, le agradeció personalmente.
El avión Boeing 757-200 partió de Barcelona a las 18 (hora local) y llegó a Zúrich una hora después. Una vez allí, sus pasajeros fueron a pasar la noche a hoteles, que pagaron de su propio bolsillo, según pudo saber Clarín.
Pero no pasarán allí mucho tiempo: este domingo por la mañana se reunirán con los profesionales argentinos venidos de otras ciudades europeas y todos juntos abordarán el avión, que se espera que parta a las 9 de Zúrich y llegue a las 19 al Aeropuerto de Ezeiza.
El vuelo de repatriación de médicos está programado para salir desde Zúrich este domingo.
Entre los profesionales que vienen figuran una residente de Dermatología del Hospital Italiano que estaba completando un posgrado en España, un médico del Garrahan, un kinesiólogo especialista en sistemas respiratorios y residentes con especialización en diagnóstico por imágenes.
El operativo retorno no fue fácil: además del esfuerzo empresario y de los mismos profesionales de la salud, hizo falta la colaboración de Cancillería para poder volar en un panorama de cancelaciones constantes y prohibiciones para circular en los países europeos más afectados por el Covid-19. Además de Solá y Kreckler, también cumplieron un rol clave en las gestiones el secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Jorge Neme, y el cónsul argentino en Barcelona, Alejandro Alonso.
Una vez en Buenos Aires, los profesionales cumplirán el protocolo correspondiente: se someterán a desinfección, se medirá su temperatura corporal y se les ordenará una cuarentena de 14 días.
En varios países del mundo hay unos 200 médicos más que quieren volver al país. Desde Cancillería informaron que se está analizando su regreso en el marco de las disposiciones tomadas por el presidente Alberto Fernández.
Es que el jueves el Gobierno nacional anunció el cierre total de las fronteras, de los aeropuertos y puertos de todo el país al menos hasta el martes. La medida dispuesta por un decreto de necesidad y urgencia alcanza a los argentinos que están en el exterior, salvo pocas excepciones, como la de estos profesionales de la salud.
